negra de tus miradas ilumine
tu bello despertar de primavera;
cuando tus grandes ojos sean las nubes,
tu corazón un sol, tu piel la tierra
sonrosada de un mundo de rubores;
cuando el amor tu nombre frío deshiele
sin que por eso pierda su blancura;
cuando un hombre te quiera y tú, queriéndole,
escuches su silencio con tu boca.
Manuel Altolaguirre
intothedarkness - photo by Catherine Shyu
Maravilloso aquí, Altolaguirre.
RispondiEliminaSinestesico e impresionantes el último verso,
que con el penúltimo le dan al final del poema una textura íntima e irrepetible, como la de ese beso que anuncia.
Bravo, Manuel!
Sì, el ultimo verso es muy bueno.
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